viernes, 10 de octubre de 2008

Un día, narrado anticronológico

Un gato en la calle mientras iba a mi casa. Se agazapaba. Tú no sabes, gato, que veo en muchos colores e igualmente distingo tus formas.

Unas canciones en el ipod, fueeeerte, gritaban las gentes en mi oído. Gritaba fueeeerte en mi oído Kim Deal.

Muchas cervezas, muchas más de las que debería haberme permitido. Muchos cigarros también, pero además muchas risas.

Fotos que algún día revisaré en aperture.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Grande amigo... obvio... las chelas nunca deben ser pocas... te acostumbrarás! hahha... un abrazo y siempre es un places carretiar con usted.... ;)