martes, 17 de abril de 2007

Juzgados

Despierto tarde (as usual), me visto decente (as unusual), llamo un taxi, parto. Llego justo a la hora, me encuentro con el resto de la gente, esperamos, nos llaman. Vamos de a uno, declaramos, vamos todos juntos, nos informan. Espero mis documentos provisorios, me voy.

Debo decir que dentro de todo, tengo la suerte de haber conocido a las personas relacionadas con el choque, todos excelentes. El taxista, el dueño del taxi, el señor de la camioneta y su esposa. Si alguna vez leen esto (que lo dudo, pero nunca se sabe), les mando un abrazo muy grande, realmente el honor es mío.

De vuelta en casa, tomo desayuno con mi abueli (no lo hacía hace muuucho tiempo), conversamos, nos reímos, vemos la tele (changing rooms). Luego me vengo a programar un rato y ahora estoy descansando tomando + café porque tengo frío.

¿Reflexiones finales? De todo se aprende, todo es aprender.

2 comentarios:

Jaskask dijo...

Viva el café y las buenas experiencias!

Janoma dijo...

Borra la categoría juzgado. Y me decías desgraciado por decir que nunca había ido a uno...