martes, 7 de agosto de 2007

Las velocidades

Antes de chocar, parece que andaba muy acelerado. Hoy, mientras manejaba, me dio la impresión de ir muy rápido. Al mirar el tacómetro, descubrí que iba a 50 km/h. Esa velocidad hasta antes del choque me hubiera parecido no sólo irrisoria, si no que ridículamente lenta. Vamos, para andar a esa velocidad mejor caminaba. Ahora pienso en lo ridículo que era, en lo descontrolado que andaba y en cómo no volver a ser estúpido en una materia en la que, simplemente, no puedes serlo.

Realmente tuve mucha suerte.

1 comentario:

Jaskask dijo...

Todos tuvimos suerte, que no perderte fue lo mejor. Qué susto! Y bueno lo de las velocidades quizá sea un daño en el cerebro de los físico-matemáticos.